La semana pasada salió uno de los juegos más esperados por el mundo gamer: Horizon Zero Dawn. Un videojuego cuya trama tiene lugar en un mundo postapocalíptico, albergado por colosales y tremebundas criaturas mecanizadas que dominan el territorio que en su momento fue de la humanidad. Nuestra especie roza las vías de la extinción y para poder sobrevivir hemos tenido que retroceder hasta los albores de nuestra historia y volvernos a convertir en cazadores y recolectores, enfrentándonos a una geografía inmensa e inhóspita.
No cabe duda de que el videojuego hasta ahora ha sido todo un éxito, pero ese no es el tema que nos concierne aquí. Lo que hemos venido a tratar aquí y que, muy pronto veréis a continuación, no es el contenido, sino el continente, es decir: el empaque promocional. Sony Computer Entertainment ha sido la distribuidora del videojuego, pero la agencia que ha estado detrás de la campaña promocional -al menos parte de ella- es Biborg, la cual nos ha ofrecido una campaña visualmente muy atractiva e increíblemente acertada.
El concepto de la campaña audiovisual se basa en la narrativa del videojuego y plantea la siguiente cuestión: ¿cómo sería nuestro mundo dentro de 1000 años? La respuesta a esa pregunta la podéis encontrar en una serie de cinco anuncios en los que vemos cómo algunas de las ciudades europeas más importantes (Madrid, Londres, París, Berlín y Roma) se han convertido en un vestigio de lo que fueron en su momento.
Madrid
Londres
París
Berlín
Roma