¿Alguna vez os han regalado algo que no os ha gustado por Navidad? Si la respuesta es que sí, conoceréis perfectamente esa sonrisa forzada que nos obliga a estimular todos los músculos de la cara como si fuéramos autómatas. Gesticulamos y sobreactuamos para que la persona que nos ha hecho el peor regalo de nuestras vidas pueda tener la satisfacción de vernos satisfechos. Probablemente todos hayáis experimentado una situación de esas características, y los que no pues afortunados seáis.
La última campaña de navidad del retailer británico Harvey Nichols, “Avoid #GiftFace”, ha sido creada por adam&eveDDB -están que se salen últimamente-, y trata exactamente sobre ese insight. Nos traen un spot, y varias gráficas, en el que una pobre chica se somete al ritual navideño de la entrega de regalos entre familia. Todos los regalos son horribles y tiene que salir del paso con una amable sonrisa de oreja a oreja, como si por un momento las comisuras de los labios estuvieran tensadas mediante hilos invisibles.